Decálogo de las cosas. “Nunca fuimos modernas”

1. Reconoce la agencia de las cosas: Las cosas no son simples objetos pasivos, sino que tienen una capacidad de acción y agencia en la construcción de la realidad.

2. Aprecia la diversidad de las cosas: Las cosas se presentan en una amplia variedad de formas, tamaños, colores y funciones. Valora la diversidad y reconoce la belleza en la multiplicidad de las cosas.

3. Reflexiona sobre la relación entre las cosas y los seres humanos: Examina cómo las cosas nos afectan y cómo nuestras acciones influyen en ellas. Comprende que nuestra relación con las cosas es bidireccional y que somos co-creadores del mundo material.

4. Observa la temporalidad de las cosas: Las cosas están sujetas a cambios y transformaciones a lo largo del tiempo. Reflexiona sobre su evolución y transitoriedad,considerando cómo esto se refleja en nuestra propia existencia.

5. Cuestiona la jerarquía de las cosas: No todas las cosas deben ser valoradas en función de su utilidad o precio. Examina los sistemas de valores establecidos y busca apreciar las cosas por sus cualidades intrínsecas.

6. Reconoce la interconexión de las cosas: Las cosas existen en una red de relaciones complejas. Considera cómo interactúan entre sí y cómo su presencia influye en otros elementos del entorno.

7. Explora el simbolismo de las cosas: Las cosas a menudo tienen significados simbólicos y culturales. Investiga cómo se utilizan en diferentes contextos, cómo contribuyen a la construcción de identidades y a narrativas colectivas.

8. Practica la responsabilidad hacia las cosas: Reconoce que nuestras acciones y decisiones tienen un impacto en las cosas y en el entorno natural. Fomenta una actitud de cuidado y preservación de las cosas para las generaciones futuras.

9. Cultiva una relación consciente con las cosas: Desarrolla una conexión consciente y apreciativa con las cosas que te rodean. Presta atención a su presencia y cómo influyen en tu vida diaria.

10. Reflexiona sobre la esencia de las cosas: Examina la naturaleza de las cosas y las preguntas filosóficas que plantean. Cuestiona la realidad subyacente y busca una comprensión más profunda de la existencia a través de la contemplación de las cosas.